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lunes, 25 de junio de 2012

Una caja de fósforos


El mar se mostró esquivo en mi última visita. 
Calma, niebla, nubes, llovizna, humedad... resfrío. 
Mi cámara de fotos fragata lo guardó así:
como en sueños.




lunes, 19 de diciembre de 2011

El bosquecito



Es difícil adivinar quién se esconde entre los pastos, pero no imposible. A veces hay sorpresas y logran descubrirla, apenas un rato.
Ahí estoy en un autoretrato que hice con mi lata cuadrada, faltó un pedacito de cabeza pero bastante bien la toma. Se ve el movimiento del pelo y del pino del fondo.
Estoy tratando de conseguir voluntarios para hacer una serie de fotografías ahí. Luego también queremos hacer alguna muestra ahí, entre los árboles.

viernes, 25 de noviembre de 2011

El bosquecito

Es difícil adivinar qué se esconde entre los pastos, pero no imposible. A veces hay sorpresas en el "bosquecito" de la universidad donde doy clases.
Esta foto la obtuve con una nueva lata* y en el primer intento logré el tiempo de exposición adecuado, unos 5 minutos. La fotografía estenopeica es experimental, se debe al prueba y error, la incertidumbre y la magia de las imágenes. No se sabe con exactitud que se enfoca, ni cómo la luz dibuja la imagen en el papel sensible. Las sorpresas son estímulos para seguir jugando.






*Lata= cámara de fotos estenopeica. Mi nueva cámara es una lata cuadrada con una distancia del estenopo (el orificio por donde entra la luz) hasta el papel sensible, casi como el de una lente normal.

lunes, 4 de julio de 2011

Guldheden


Olof Heinö es amigo de una amiga, es un fotógrafo sueco y ha pasado un tiempito en nuestro país. Es una persona sumamente agradable, resulta un placer charlar con él de lo cotidiano como uno más de la ciudad.
La semana pasada tuve la oportunidad de ver una muestra de sus fotos, todas eran de su barrio en Suecia, "Guldheden" (Monte Dorado). El montaje no podía haber sido más adecuado, luego de subir un par de pisos por una escalera empinada y angosta Olof te ofrecía un vaso de vino o cerveza, te sugería leer un texto que explicaba un poco lo que se iba a ver y te daba una pequeña linterna para hacerte camino. Se habría la puerta y el recorrido de la muestra se hacía en dos habitaciones en plena oscuridad, que se iluminaban con las linternas y los claros, a veces mínimos, de las fotografías. Por un momento creí estar en una de esas películas del cine nórdico que a mí tanto me atraen. Fue una delicia esa muestra gélida, que tomó un especial color y calor, cuando él relató con pasión rincones de su barrio. Acá pueden ver un par de las fotos.

viernes, 4 de marzo de 2011

La hora naranja


Me pregunto si nuestra ciudad creció, se desarrolló y expandió de espaldas al Río – el mismo que fue su germen- tan solo por un enojo un poco infantil, pero admisible, el de no poder ver guardar el sol en esa línea que forma el cielo con el agua. Algo que sin duda es magia.


Agrego la imagen. La foto de la caída del sol desde el muelle de Carmelo, la rareza se debe a que fue sacada con una cámara estenopeica hecha con una caja de fósforos. Claro que un día tengo que escribir sobre este tipo de fotografía que cada tanto me entretiene.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Azul de Prusia


Azul de Prusia es un pigmento, que como muchas de las sustancias coloreadas, proviene de un compuesto químico que tiene entre sus átomos algunos de los metales de transición. En este caso el hierro es culpable, para ser más precisos el color depende de los electrones más externos de este átomo y del entorno dado por los otros átomos del compuesto, un escenario que permite una danza de electrones capaz de generar un color determinado.

Azul de Prusia fue como bautizamos con Apollonia a la unión musical de unos amigos. Pasó hace tiempo, recuerdo que Manu, nuestro amigo en común, nos presentó una noche de octubre en Bernal –si bien hablamos de nanotecnología aquella vez, no sabíamos que años después nos re-encontraríamos trabajando en el mismo laboratorio-, Prusia había propuesto ella, Azul de… completé yo. La banda estaba formada por Cata en voz, Manu en guitarra, voz y composición y luego se sumó Jhon, el guitarrista de verdad. La unión duró unos cuantos suspiros, luego Manu se fue a buscar amores a España, Cata se dedicó al hogar y Jhon a su metier: la música. Cata y Jhon tuvieron algunas presentaciones en público, y queda pendiente un encuentro invernal acompañado de guisos y vinos, pero ya llega la primavera y la velada está en ascuas.



Anna Atkins fue una botánica y fotógrafa inglesa que a mediados del siglo XIX editó el primer libro de imágenes fotográficas “British Algae: Cyanotype Impressions”, adelantándose unos años al más popular “Lápiz de la Naturaleza” del William Talbot. Se podría decir que Anna fue una mujer con suerte, ya que su padre era un reconocido naturalista de la época, que ayudó en su formación científica y que la vinculó con otros hombres dedicados a la ciencia; fue así que pudo desarrollar su carrera como botánica, y entrar en contacto con otros vecinos pioneros de la fotografía como Talbot y Herschel, un matemático y químico que había descubierto un proceso fotográfico que creaba positivos de un color azulado: el cianotipo. Más allá de la suerte y las vinculaciones, sin dudas Anna fue una mujer inquieta y paciente a la vez, realizó su libro por partes; la primera vio la luz en Octubre de 1843. Publicaba los álbumes de forma regular, el último está fechado en 1853. En total suman alrededor de 400 imágenes. Se conocen unas doce copias. Este número limitado de ejemplares se debe a que cada una de las imágenes está hecha a mano y de una en una.

El cianotipo es un proceso fotográfico que a partir de la mezcla de dos compuestos químicos que se pintan sobre un papel y la posterior exposición a la luz genera un compuesto estable de color azul. La figura fotografiada impide el paso de luz y forma una silueta blanca, el fondo de la imagen es azul de Prusia.

lunes, 23 de agosto de 2010

Fidelidad a una obsesión


no significa nada
para vos
poesía sentí yo




Andrei Tarkovski guardó en polaroids su escenario ruso, antes de partir a Italia para filmar Nostalgia, esas fotografías fueron editadas en Instant Light, TARKOVSKY Polaroids . Una belleza.

domingo, 21 de marzo de 2010

Las babas del diablo

Me senté a escribir porque: 1) la otra opción era limpiar más la casa y ordenar la parte alta del mueble; 2) la última colgada data de unos cuantos días atrás, me incomoda abandonar este espacio, pero cada tanto me pasa que no me sale contar nada, o, lo que es peor, me sale contar cosas que no quiero exponer por repetidas, mustias, inexistentes, demasiado personales; 3) alguien me sacó de la modorra preguntando si ya no iba a escribir más; 4) se largó a llover; 5) el gato naranja duerme tendido en su máxima longitud sobre la manta unos tonos más oscuros que él; 6) en los azulejos de mi cocina hay dos rectángulos de papel sensible a la luz que ayer inpregnaron fotones a través del ojo de mi cámara estenopeica; 7) en el cuaderno hay tres textos que necesitan secarse, el del barrio de Villa Urquiza había sido el elegido para inaugurar la temporada de la melancólica felicidad que me trae el otoño -los otros son de los que no quiero que salgan-, pero recordé que tenía ganas de avisar de la muestra de "Grete Stern, Los sueños 1948 - 1951",en el MALBA por si algún despistado no se había enterado aún.

Primero fue la imagen y luego el conflicto. Para que esta colgada no sea un simple aviso de agenda urbana, ni una reseña del catálogo, además, como tuve la oportunidad de ver la muestra cuando estuvo en el CCR unos años atrás – Grete Stern es una de mis favoritas y seguro que hay una antigua mención en estas páginas, además de las fotos que ilustran la entrada de mi sueño- me metí entre los estantes de los libros para armar algo coherente, o al menos armar algo. Ay de mi inocencia, quedé atrapada en una suave maraña de ideas, fragmentos de citas* y autores** que divergieron de un click de Susan Sontag y convergieron en una singular imagen surrealista, imposible de describir y que me llevaría toda la tarde procesar. Entiendo esto como mi mejor recomendación para ir a ver esta muestra, aunque los del MALBA sean unos ladrones, eso sí de guante blanco.

Una mínima información, Grete Stern nació a principios del s. XX en Alemania, estudió en la escuela de la Bauhaus, se fue exiliada un tiempo a Londres, pero finalmente llegó a nuestro país junto a Horacio Coppola. Aquí se estableció y realizó su carrera como fotógrafa.
Otro detalle que no se aclara en la gacetilla de la muestra, dicen que gran parte de esta producción fotográfica se perdió porque la editorial Abril no conservó los originales.




*En el libro "Sobre la fotografía", hay una breve antología de citas que Sontag dedica W. Benjamin, a quien describe como "un apasionado coleccionista de citas".


**D. Arbus, W. Benjamin, Ch. Baudelaire, A. Breton, J. Cortázar, A. Pellegrini, (con un bonito libro de recopilación de poetas surrealistas), Man Ray.


sábado, 11 de octubre de 2008

Josef Sudek en el Isaac Fernández Blanco

Recién supe de Josef Sudek el sábado pasado, me lo presentó mint al quitar el film protector a un libro de sus fotografías y dármelo para que le eche una mirada. También me adelantó algo sobre una muestra inminente de este fotógrafo checo en el museo Isaac Fernández Blanco, que ahora leo, se inauguró el pasado martes y continúa hasta el 7 de diciembre.
Un par de fotos de ese librito y las que aparecieron ahora, son suficientes para saber que no me demoraré en dar una vuelta por ahí. (Lugar bonito más allá de la muestra temporaria.)

A veces es extraño ver como se ciclan los hechos.

A veces prefiero no regresar entre estas páginas, pero igual lo hago.

A veces disfruto, pero igual lo hago.

A veces, que digo a veces, siempre intento que la espiral deje de tener solo dos dimensiones.