martes, 6 de noviembre de 2007

Chica Rutera (IV)

(es gracioso porque el ChR original nunca lo llegué a colgar porque estaba sin compu Cuando sucedió, lo escribí en algún lado y lo perdí… ya aparecerá entre los papeles)

El regreso no fue tan rápido como la ida, el charter partía muy temprano y preferí quedarme un rato más, total mis necesidades en un micro son aire acondicionado y puntualidad (+/- 15 minutos). El viaje es de 4 horas, mucho no me preocupo, pero por comprar pasaje a último momento me tocó:

  • Coche semi-cama de refuerzo, o sea una cagada, eso no me jode.
  • Último asiento, pegado al baño, era ventanilla no me quejo.
  • Un televisor a mts de distancia, quien quiere ver las pelis en los colectivos.
  • Salir 15 minutos tarde, cae dentro de mi límite confianza, todo bien.

Ni bien salimos prendieron el aire, gran felicidad para mí. Algunos canales de ventilación estaban rotos y salía un terrible chorro de aire fresco (vease la fotografía debajo).

El co-piloto fue en rescate de una de adelante que se quejó y le solucionó el problema.

-¿Vos también querés que te digitalice el aire? – me preguntó

- No gracias, ya ví como se hace, cualquier cosa me arreglo sola, los vasos los tengo acá al lado. (vease fotografía 2 y aprendan a regular el aire acondicionado en caso de urgencia)


Me pregunto cual es la necesidad de ir al baño a los 5 minutos de partir. La chica de los palos de cricket, lo necesitó. La puerta del baño estaba trabada. Nuevamente el co-piloto al rescate, esta vez la fuerza prevaleció sobre el ingenio (data not shown)

Hasta San Nicolás viajé sin compañía en el asiento vecino, el vacío sirvió para dejar mi bolso y extender mejor mis piernas, y grabar algo con la cámara (video demostrativo).




En el parador subió un chico que se acomodó tranquilo, se colocó sus auriculares y no molestó. También subieron 4, no muy tranquilos, con la inconveniencia que sólo quedaban asientos para 3. Luego de una serie de reordenamientos, dos quedaron sentados en los dos asientos justo adelante. Otro unos cuantos asientos más allá y el cuarto de pie, junto a la puerta del baño, entre esta y el asiento pegado al mío, que por suerte había ocupado, unos instantes antes, el chico que ofrecía cierta seguridad.
Los 4 sujetos desfilaron por el baño una y otra vez, recuerden la dificultad que presentaba el abrir la puerta. Se paraban, se sentaban, se cambiaban de asiento y a mí me inquietaron un poco. Me dediqué a cuidar de mis bolsos y mirar por la ventanilla mientras por mi mp3 pasaban: Norma, Picnic, Los Saicos, Virus, Sabath & Savalas y no sé que más.
En un momento, unos de ellos le dice algo al chico a mi lado, él da un OK. Luego me pregunta a mí:

-A vos te jode si nos tomamos una birrita, acá?


-No, todo bien… pero después no jodan
- fue mi respuesta


La puerta del baño siguió abriéndose y cerrando durante todo el viaje, en dos ocasiones fumaron, pero no tenía ganas de pelear. Es más, me divertí bastante con estos personajes, en especial cuando en una de las aberturas la puerta se estampó contra la cara de uno.
Disfruté de las estrellas en la parte más oscura de la ruta y me dormí un instante luego que estos se bajaron en el parador de Pilar o por ahí.

No sé por qué siempre me pasan estas cosas?

4 comentarios:

reinita neurótica dijo...

noooooooo
no te quejes. Mi último viaje a Brasil (Retiro-Foz) fue terrible. Te resumo: línea: Pluma (según me comentaba mi marido, experto en la mencionada ruta, el viejo que era el dueño se murió y los hijos no le dan ni bola a la empresa, por eso los micros andan mal). En Retiro, una paraguaya le hace el verso a mi hermano que me fue a despedir y tratan de robarle el bolso. Mi padre a las piñas, misma paraguaya (con probables familiares esperándola en Foz) que viajaba conmigo ¡atrás mío! (yo con criatura de un año). Al compañero de asiento de la paraguaya le desaparece la camarita digital. Chofer brasileño ultra bigotudo del campo (dialectísimo) enojado. Profesor de capoeira bahiano y gritón quejándose: esse motorista vai se arrepender de ter criado esse bigodao, viú! Grupete de argentinos conunarubiaenelaviondirectoabrasil escabiando al fondo (al lado mío). Micro que se empieza a romper cada dos horas desde Paso de los libres (Corrientes) hasta Foz. Al llegar, pasajeros indignados por un viaje de 17 hs que duró 25 para que les devuelvan la plata. Encargado chamuyero que nos termina pagando una noche de hotel a todos. Hotelito buenísimo con desayuno super completo, al final. No te quejes...

wallychoo dijo...

No se con cual de las 2 historias me quedo...
Si con la tuya o la de Reyni...
Compilemos un boock...

Abrazo sonrisa y beso

Unknown dijo...

Ja, Reinita la tuya me gana, pero mi anterior viaje a Rosario duró como 8 horas, ataque mío en el medio de la ruta reclamando que me suban a cualquier micro pero que me lleven.

wallyzz sabés de alguien que pueda editardo o tendrá que ser todo casero.

saludos

Anónimo dijo...

ayyyy si hubieras ido a Rosario el viernes 9/nov. podrías haber ido a ver a mi amiga la Dirriko (la transformista) que tenía una fecha en un lugar llamado El Pikadero.

Alto voltaje con la mostra esa!
No te la pierdas el próximo viaje a Rosario City, besoooo!