Hoy dan “Realmente amor”, no sé si en el 13 o en el 11 y seguro es en esos horarios que inventan ahora de 22:35 o que se yo.
Love Actually, así su nombre original, es de las típicas películas románticas inglesas que ponen a Hugh Grant para elevar la emoción de no se quien, porque ese chico tiene menos sex-appeal que yo, pero se ve que da el perfil de madres y novias. Debo admitir que a fuerza de ver películas inglesas, que a mi me gustan mucho, este muchacho me terminó cayendo simpático y si dan en la tele “4 Bodas y un funeral” o “Notting Hill”, y no tengo otra cosa que ver, vuelvo a verlas. Esta película además de ser inglesa, tiene a su favor el ser coral y esas también me pueden, aunque no siempre las películas que mezclan historias resultan buenas, hay quienes se destacan en el género, es por eso que quiero ver “Noches mágicas de Radio” de Robert Altman, que se estreno el jueves pasado.
Volviendo a Realmente amor, a pesar de todo lo cursi y estereotipada que es, y de un par de momentos demasiado sensibles, en especial el del aeropuerto, quizás ese es un problema personal, resulta entretenida y re-mirable, pero no lo suficiente para dedicarle un posteo sino fuera que esta película viene acompañada de una anécdota.
Si se estrenó en el 2003, entonces era octubre del 2004 cuando estaba de visita un amigo que vive en Boston, Ale; se organizó así de golpe una salida un viernes por la tarde-noche (que era de Brujas), en una expedición que venía recolectando gente desde Bernal. La idea original era ver una peli en el Village Recoleta, pero ahora ya no recuerdo por que fue que en mi primer ida al lugar nunca los encontré y que en la segunda no nos pusimos de acuerdo o no se habían conseguido entradas con descuento, o no sé bien por qué, la cosa es que la pelí se frustró y después de varias indecisiones y hasta cenas frustradas, quedamos como exploradores: Ale, Cata, Pato (una chica de la facultad ex compañera de labo de Ale) y yo. De pronto nuestra nueva misión, mientras caminábamos por Las Heras y Junin, fue ir a casa a ver “Realmente Amor”, película que ya habíamos visto todos, menos Pato. Parece que en el viaje en tren hasta capital Ale y Cata venían cantando el tema principal “I feel it in my fingers I feel it in my toes love (or christmas) is all around me…” y recordando la película, y nada en el mundo iba a evitar que la viéramos.
Que había que hacer entonces, buscar un blockbuster, porque por la hora ya no llegábamos al video donde yo alquilaba, ahí recordé que por las Heras y Laprida o Azcuénaga o por ahí había uno. Llegamos y nada. Segunda opción entrar a un cyber y buscar por internet las direcciones más cercanas: Cerviño y Salguero, Las Heras y Azcuénaga. ¿Pero si estábamos en esa dirección como era posible no ver semejante local?. Vamos al otro, rápido que ya cierran. Nos dimos cuenta después, que el cyber donde entramos, estaba situado donde antes estaba el blockbuster. En el camino un chico vestido de negro me regaló un dibujo muy bonito de un niño con anteojos y que aún conservo como un bello trofeo. Llegamos al local de Salguero y resulta que la película estaba alquilada. La empleada nos quería convencer de ver otra, y hasta nos llego a decir “…pero bueno, la peli no es tan buena”. Ahí tuvimos que inventar algo para no quedar como 4 tarados, aunque de verdad lo fuéramos, frente a una empleada de dicha cadena. No quiero generalizar, pero los que trabajan ahí no saben nada de cine.
Ale le explicó que teníamos que conseguirla sí o si, porque alguien necesitaba verla porque sino se iba a sentir muy mal y no sé que más o ¿fue por una apuesta? ahh pero no me acuerdo, yo sé que la chica, casi conmovida, se iluminó y llamó al local de Honduras y Salguero para preguntar si estaba disponible. Estaba, pero también faltaban 5 minutos para cerrar. Le pedimos que les avise a los empleados que 4 personas iban para allá a buscar la peli, que por favor nos dejen pasar. Trato hecho. Corriendo nos subimos a un taxi y le dijimos al choffer “rápido hasta honduras y salguero tenemos que llegar en 5 minutos”, él acató nuestra orden al pie de la letra le metió pata, esquivo autos, y doblo en dos ruedas, como si toda su vida de taxista hubiera estado esperando por esa oportunidad. Llegamos, golpeamos para que nos abran, los empleados ya estaban limpiando todo, y no nos querían abrir, explicamos que éramos los que venían del otro local, tuvimos que soportar otro: “…pero la peli no es tan buena”, y nos fuimos felices. Previo paso por un barcito, para comprar un vino, y una heladería. Nos seguimos cruzando con algunos disfrazados, producto de esa adopción sinsentido que se viene haciendo de Halloween. Vimos la peli, tomamos helado y vino y supongo alguna que otra lágrima derramamos, como es probable que vuelva a hacer hoy si veo otra vez la peli. Porque esa peli es re-linda.
Love Actually, así su nombre original, es de las típicas películas románticas inglesas que ponen a Hugh Grant para elevar la emoción de no se quien, porque ese chico tiene menos sex-appeal que yo, pero se ve que da el perfil de madres y novias. Debo admitir que a fuerza de ver películas inglesas, que a mi me gustan mucho, este muchacho me terminó cayendo simpático y si dan en la tele “4 Bodas y un funeral” o “Notting Hill”, y no tengo otra cosa que ver, vuelvo a verlas. Esta película además de ser inglesa, tiene a su favor el ser coral y esas también me pueden, aunque no siempre las películas que mezclan historias resultan buenas, hay quienes se destacan en el género, es por eso que quiero ver “Noches mágicas de Radio” de Robert Altman, que se estreno el jueves pasado.
Volviendo a Realmente amor, a pesar de todo lo cursi y estereotipada que es, y de un par de momentos demasiado sensibles, en especial el del aeropuerto, quizás ese es un problema personal, resulta entretenida y re-mirable, pero no lo suficiente para dedicarle un posteo sino fuera que esta película viene acompañada de una anécdota.
Si se estrenó en el 2003, entonces era octubre del 2004 cuando estaba de visita un amigo que vive en Boston, Ale; se organizó así de golpe una salida un viernes por la tarde-noche (que era de Brujas), en una expedición que venía recolectando gente desde Bernal. La idea original era ver una peli en el Village Recoleta, pero ahora ya no recuerdo por que fue que en mi primer ida al lugar nunca los encontré y que en la segunda no nos pusimos de acuerdo o no se habían conseguido entradas con descuento, o no sé bien por qué, la cosa es que la pelí se frustró y después de varias indecisiones y hasta cenas frustradas, quedamos como exploradores: Ale, Cata, Pato (una chica de la facultad ex compañera de labo de Ale) y yo. De pronto nuestra nueva misión, mientras caminábamos por Las Heras y Junin, fue ir a casa a ver “Realmente Amor”, película que ya habíamos visto todos, menos Pato. Parece que en el viaje en tren hasta capital Ale y Cata venían cantando el tema principal “I feel it in my fingers I feel it in my toes love (or christmas) is all around me…” y recordando la película, y nada en el mundo iba a evitar que la viéramos.
Que había que hacer entonces, buscar un blockbuster, porque por la hora ya no llegábamos al video donde yo alquilaba, ahí recordé que por las Heras y Laprida o Azcuénaga o por ahí había uno. Llegamos y nada. Segunda opción entrar a un cyber y buscar por internet las direcciones más cercanas: Cerviño y Salguero, Las Heras y Azcuénaga. ¿Pero si estábamos en esa dirección como era posible no ver semejante local?. Vamos al otro, rápido que ya cierran. Nos dimos cuenta después, que el cyber donde entramos, estaba situado donde antes estaba el blockbuster. En el camino un chico vestido de negro me regaló un dibujo muy bonito de un niño con anteojos y que aún conservo como un bello trofeo. Llegamos al local de Salguero y resulta que la película estaba alquilada. La empleada nos quería convencer de ver otra, y hasta nos llego a decir “…pero bueno, la peli no es tan buena”. Ahí tuvimos que inventar algo para no quedar como 4 tarados, aunque de verdad lo fuéramos, frente a una empleada de dicha cadena. No quiero generalizar, pero los que trabajan ahí no saben nada de cine.
Ale le explicó que teníamos que conseguirla sí o si, porque alguien necesitaba verla porque sino se iba a sentir muy mal y no sé que más o ¿fue por una apuesta? ahh pero no me acuerdo, yo sé que la chica, casi conmovida, se iluminó y llamó al local de Honduras y Salguero para preguntar si estaba disponible. Estaba, pero también faltaban 5 minutos para cerrar. Le pedimos que les avise a los empleados que 4 personas iban para allá a buscar la peli, que por favor nos dejen pasar. Trato hecho. Corriendo nos subimos a un taxi y le dijimos al choffer “rápido hasta honduras y salguero tenemos que llegar en 5 minutos”, él acató nuestra orden al pie de la letra le metió pata, esquivo autos, y doblo en dos ruedas, como si toda su vida de taxista hubiera estado esperando por esa oportunidad. Llegamos, golpeamos para que nos abran, los empleados ya estaban limpiando todo, y no nos querían abrir, explicamos que éramos los que venían del otro local, tuvimos que soportar otro: “…pero la peli no es tan buena”, y nos fuimos felices. Previo paso por un barcito, para comprar un vino, y una heladería. Nos seguimos cruzando con algunos disfrazados, producto de esa adopción sinsentido que se viene haciendo de Halloween. Vimos la peli, tomamos helado y vino y supongo alguna que otra lágrima derramamos, como es probable que vuelva a hacer hoy si veo otra vez la peli. Porque esa peli es re-linda.
9 comentarios:
Naaa toda esa travesía por una peli que es una garompa (con perdón de la expresión). En serio, es mala, chota, sensiblera y vulgar... los empleados del videoclub tenían razón!!
Y aclaro, yo también soy de los que ven “4 Bodas y un funeral” o “Notting Hill”, si no tengo otra cosa para ver en la tele. Pero Love Actually me provoca verguenza ajena!
ja, ja, ja! Sí que es mala comparada con las otras pero ya me encariñé!
hermosa la anecdota del taxista. El tambien la debe contar (pero con su propio principio y su propio fin...como para hacer una pelicula coral!).
A mi me gusto la pelicula mucho, aunque reconozco tambien su tinte cursi. Ahi me di cuenta lo maravillosa que es emma thompson y sufri en mi propia carne su sufrimiento cuando abre el paquete que cree ser el collar y resulta ser un CD. LA cara y la reaccion de esa mujer en ese momento son impagables (lo mismo el momento en que advierte al marido que tenga cuidado con la otra chica).
Y lo mismo me paso con little Hugh...me parecia un tarado y nunca mire NINGUNA de sus peliculas (excepto por About a Boy). Ahora, la verdad que si me toca el timbre, lo dejo pasar...
Euge tenés qeu ver "4 bodas y un funeral" que esta más que bien y "Noting Hill" sólo para ver la ciudad y esa calle tan hermosa, que ganas de estar ahí.
Y si a Hugh Grant uno le termina abriendo la puerta, aunque sea para que te cuente de Londres.
Escuchando a nuestro amado Jarvis
Hoy a la tarde con stella vimos una de las japonesas, era simpática pero atrás había una vieja que relataba toda la película... la quise matar!
Qué maravilla sus recuerdos sobre esa peli, cr!
Yo la vi bastante después de estrenarse y eso fue en Mardel, en una sala que estaba cerca de la Rambla... ¿cómo se llamaba? Bueno, no importa. La cosa es que tenía unas butacas de madera re duras y antes de la mitad de la peli yo ya no sabía como sentarme. Afortunadamente tenía una bolsita de chocolate artesanal y eso palió un poco el maltrato a mis pompis.
Me gustó Hugh Grant en esa peli, en realidad me gustó la película toda, tan british ella.
Aunque creo que me gustaron más los chocolates artesanales... hmmm!
Hugh Grant, es el mejor actor de la historia del cine
y love Actually es una joya qeu me copre en DVD, para verla dos veces por semana
y que???????
JUAN PABLO SALA
asi no quedan dudas
4 a 1 al final la película gusta. Ayerla vi prestándole poca atanción así que faltaron las lágrimas, mi historia preferida es la del escritor y la chica portuguesa.
Me enteré que anoche por un barrio de bernal merodeaba una pandilla con un siniestro plan: impedir que las personas vean tranquilas la película en su hogar.
ciudadana odio los cines de butacas molestas, por suerte los chocolates todo lo hacen olvidar
cr, aquí visitando su blog y me enganché con este tema... Yo tb ví esta peli por primera vez en ese cine de Mardel! Y me gusto mucho, mucho, con todos sus defectos y virtudes argumentales - y la tengo en truchi-dvd ahora, integrando mi lista de pelis a ver a repetición hasta el hartazgo :)
Desconocía su gusto por las pelis british, bien ahí ud!
Saludos!
Ah pero que honor Andie tenerte Andie por aquí, y otro voto positivo por la película, muy bien.
nos vemos por ahí, saluditos!
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