Creo yo, que a esta altura del campeonato -y no hago referencia al mundial de fútbol- es un saber común a todos que la helicoidal molécula de ADN, de estructura similar en todos los organismos vivos, es la portadora de la información genética: un mensaje codificado que luego de un rosario de dimes y diretes, transforma una célula en un individuo con características particulares que sirven para identificarlo y ubicarlo en su casilla correspondiente de la escala evolutiva.
Una información más detallada, que no sé si es tan conocida, es que la molécula de ADN es una macromolécula, construida por otras moléculas más pequeñas; así como un compuesto se construye por la asociación de diferentes elementos. Jugadores claves de esta macro estructura –bueno macro, ya saben que todo es relativo- son las moléculas de Adenina (A), Timina (T), Citosina (C) y Guanina (G), resulta que estas moléculas que apenas difieren en la posición de algunos átomos*, son las encargadas de dar una sutil diferencia a la cadena del ADN y componer el mensaje según su disposición a lo largo de la hebra. Otra característica es que interactúan de a pares para unir las dos cadenas de ADN complementarias, y formar así, la estructura de doble hélice. Esa interacción depende de la disposición espacial de los pocos átomos diferentes (que no son más que H, N y O) y siempre es específica: Adenina se aparea con Timina, Citosina con Guanina y no hay cambio de parejas, bueno puede llegar a suceder pero aténganse a las consecuencias.
Por último, y lo único importante de esta entrada, ya que la información reducida de los párrafos anteriores la encuentran en cualquier lado, es que cuando estudiábamos nos enseñaban una regla mnemotécnica infalible para recordar cómo se enyuntaban esas bases. Una dupla rioplatense fue suficiente para no olvidarlo nunca: Anibal Troilo, Carlos Gardel.
La semana pasada una profesora de Introducción (Introducción a la Biología Celular y Molecular) trataba de explicar a unas alumnas esta regla, pero por la cara que pusieron las chicas, creo que van a seguir apareando mal las bases en sus exámenes, al menos hasta que encuentren otra dupla más actual.
La gente de Futuro recordó esta regla en una preciosa tapa del suplemento.
También aprendí, sin reglas mnemotécnicas, ni Alberts**, Curtis y Lehninger, con una pequeña ayuda del tiempo, que no todo está en los genes.
*Para no confundir el gallinero, y para los que se interesen un poco más por la química, estás moléculas son de dos tipos: Adenina y Guanina son purinas, bases nitrogenadas formadas por dos anillos (mayor tamaño), mientras que Citosina y Timina son pirimidinas, también bases nitrogenadas pero formadas por un solo anillo (menor tamaño).
** El que encuentre una foto de la contratapa del libro que la comparta.
** El que encuentre una foto de la contratapa del libro que la comparta.