No hubo verano que quiera dar comienzo a la temporada en La Lugones, y que pueda acceder a la sala en el primer intento; por entradas agotadas o por funciones suspendidas, sistemáticamente cada año tuve que dar una segunda vuelta o tercera... el viernes no conseguí entradas llegando al límite del horario de comienzo de la última función del día, y hoy que llegué una hora antes tuve la misma suerte. Conclusión: "las funciones de las 21 hs están agotadas SIEMPRE".
La salida tuvo su recompensa, algo que sucede siempre con las salidas. Como estaba con tiempo y con ganas de perderlo, hice lo que se hace siempre por esa zona, pero sin comer pizza, tomar cerveza, o café, y en el recorrido de las librerías tropecé con un librito que esperaba desde hace un tiempito. No puedo hacer alarde de páginas impecables, porque el ámbar y el olor que magnifican los libros viejos, se ven obligados a compartir su espacio con unas manchas de humedad que cuando desaparezcan se llevarán parte de la celulosa, pero creo que de momento no alcanzan al texto ni a las fotografías. No puedo quejarme lo conseguí a $8 contra los $50 de un ejemplar que aparece publicado en mercado libre.
La vuelta en bicicleta siempre costea las salidas.
La vuelta en bicicleta siempre costea las salidas.
12 comentarios:
Qué bueno que me llevaste a pasear por tu Calle Corrientes, tan lejos de las luminarias, las plumas y las lentejuelas...
Gracias.
¡Qué gran hallazgo, y qué envidia!
Vine por aquí guiado por dos lazarillos que no erran una al elegir blogs para recomendar: andal13 de Ajo y agua y Santi el de los divagues.
Y tu blog es otro acierto, tuyo y de ellos.
Volveré, dijo MacArthur (¿o era Zavala Ortiz?).
¿Se puede saber en qué librería fué?, digo por si quedó otra de esas joyitas.
Afectuosamente.
Ay que lindo librito!
Hace tantísimo que quiero volver a leer el Adan Buenosayres para reencontrarme con palabras enlazadas así..
"...dentro de aquel ataúd sencillo (cuatro tablitas frágiles) nos parecía llevar no la pesada carne de un hombre muerto, sino la materia leve de un poema concluido"
cata
Fernando Terreno: estuve visitando "La Pulpera", y voy a compartir la receta del vino (citando la fuente claro)...me hizo vivir un ratito de invierno! Y también me acordé de una escena de Oliver Twist en que el Señor Micawber preparaba ponche en medio de un frío mortal en Londres, todo muy hermoso.. Como cuando leo Jack London y sus aventuras en el Klondike congelado y ahí afuera 39 de térmica...gracias!!
cata
Fe de erratas: donde dice Oliver Twist debe decir David Copperfield..que horror!!
¡Qué popular es la calle Corrientes en un parpadear se llenó el bullín de comentarios!
andal13: Me alegro que hayas disfrutado del paseo.
Roger: En verdad un gran hallazgo, además buscaba otra cosa y ahí apareció.
Fernando: Bienvenido, parece que voy a tener que seguir colgando para no hacer quedar mal a los lazarillos, que fueron otro gran hallazgo.
La librería (que no sé el nombre) está sobre la mano de los números impares, creo entre Paraná y Uruguay. Hay otra nueva sobre esa mano entre Montevideo y Rodriguez Peña que también tenían de buen surtido.
Cata: yo sigo sin el Adán, por ahora no encontré una linda edición.
Gracias por el cachito de invierno.
Cecilia, no recuerdo si alguna vez viste mi otro blog; me da un poco de vergüenza, parece que te obligo a verlo, pero ya que dejaste una canción de Cabrera en tu comentario, me gustaría que vieras esto:
http://andal13lapizypapel.blogspot.com/2009/12/cuando-se-trata-de-usted.html
Ah, "Méritos y merecimientos"... "cuando se trata de usted yo me quedo sin palabras mi tremenda timidez", hace mucho que no me cruzo con alguien que me deje sin palabras.
Ahora lo veo.
Ah, me pasa también... Espero que no sea por falta de méritos!
;-)
Cecilia:
Terminé de leer el libro de Marechal y, más allá de que la primera parte adhiere "demasiado" a la historia oficial, es una delicia y estámuy bien escrito.
Valía la pena, así que gracias por la perlita.
Ah que bien Fernando, me alegro!
Yo lo guardé en la estantería hasta que le llegue su momento, había leído algo previamente, ya que hay un fragmento en un libro que recopila textos de la ciudad se llama "Buenos Aires de la fundación a la angustia", de ediciones de La Flor.
De nada entonces y gracias por pasar a agradecer.
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